miércoles, 22 de mayo de 2013

Y seremos miles.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Acá también repito el comentario, que viene al caso

"No nos convertimos en lo que somos sino mediante la negación íntima y radical de lo que han hecho de nosotros", escribimos Sartre.
Hace unos meses estoy de asistente regular a congresos y foros de debate, de Historia, Literatura y Filosofía. Y persiste la lucha, entre los que quieren destruir la modernidad, de Aristóteles en adelante, olvidarse de Europa, de los Universales, pero caen en la verborragia antieuropea y el relativismo ingenuo, improductivo.
También están los que piensan que los universales modernos están vencidos, y hay que hacer unos nuevos, pero no saben por dónde empezar.
Y cuando dicen derribar la escuela, la universidad, las instituciones modernas, todavía viven y comen de una cátedra, y no pueden sacudirse eso de encima.
Porque al sistema, como decía un filósofo popular argentino, "lo tenemos bien adentro".
Allá las cosas están agitadas, por cosas que acá ya nos pasaron, por cosas menores, dicen algunos, pero las cosas pasan. La violencia, esa partera de la historia, no espera ya a ser alentada por la represión para saltar.
Así que dennos esperanzas, muévanse. Y yo, desde acá, cómodo en el sistema, que lo tengo bien adentro, pero no en mi conciencia, observo, y busco de donde agarrarme. Así que dennos esperanza, dennosla por el culo, para sacar de ese espacio al molesto sistema.

Gracias.

GN